Compromiso con la calidad educativa
Nuestra Universidad apunta a tener sus 18 carreras acreditadas para el 2024. También estrena un nuevo Modelo Pedagógico enfocado en la empleabilidad de sus egresados.

La acreditación de programas académicos contribuye de manera significativa a la mejora continua de la educación superior. Este proceso garantiza que las instituciones educativas cumplan con los estándares de calidad tanto a nivel nacional como internacional. A través de la acreditación, se establecen parámetros rigurosos que sirven como guía para evaluar y elevar la excelencia en la enseñanza.

Acreditaciones
Actualmente, la URP cuenta con 12 programas acreditados:
1. Medicina Humana (IAC-CINDA)
2. Psicología (IAC-CINDA)
3. Traducción e Interpretación (IAC-CINDA)
4. Economía (IAC-CINDA)
5. Contabilidad y Finanzas (IAC-CINDA)
6. Turismo, Hotelería y Gastronomía – Contabilidad y Finanzas (IAC-CINDA)
7. Administración de Negocios Globales (ACBSP)
8. Ingeniería Civil (ICACIT, ABET)
9. Ingeniería Electrónica (ICACIT, ABET)
10. Ingeniería Mecatrónica (ICACIT, ABET)
11. Ingeniería industrial (ICACIT, ABET)
12. Ingeniería Informática (ICACIT, ABET)

Se espera que las carreras de Veterinaria y Biología ingresen pronto a esta lista. “Las acreditaciones son un logro de las universidades en cuanto a que les permite mejorar sus procesos, respetar mejor la ley, propiciar un futuro en el que las personas se acostumbren a trabajar en función de la calidad, por medio de rigurosos estándares”, afirma el Dr. José Flores Barboza, director de la Oficina de Desarrollo Académico, Calidad y Acreditación.
Explica que las acreditadoras internacionales tienen una visión enfocada en el mercado ocupacional y la empleabilidad, lo que fomenta una educación de calidad adaptada a las necesidades del mundo laboral. El objetivo institucional es que para el año 2024, las 18 carreras de la URP estén debidamente acreditadas, en consonancia con el Plan Estratégico de la Universidad, que se enfoca en la consolidación de metas que garanticen el desarrollo de la institución y la mejora de la calidad educativa.
“La Oficina de Desarrollo Académico, Calidad y Acreditación, que está a mi cargo, tiene previsto, para el 2024, dos grandes acontecimientos. En primer lugar, el cumplimiento de la acreditación de todas nuestras carreras y, en segundo lugar, el plan de licenciamiento de la Sunedu, que establece que hacia mediados del próximo año las carreras profesionales serán convocadas para presentarse al relicenciamiento”, declara el Dr. Flores Barboza.

Con la participación de todos
Indica que la parte más crítica en un proceso de acreditación es el cumplimiento efectivo de la normatividad que establece la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), que abarca aspectos como el número de docentes, la actualización de los programas académicos y el seguimiento de los egresados.
“En la Sunedu son muy celosos de lo que se llama la ‘eficiencia terminal’, es decir, cuánto es el tiempo que pasa desde que el alumno egresa de la universidad hasta que consigue insertarse en el mercado laboral. Esa es la preocupación de la mayoría de las universidades hoy en día. Los estudiantes han llegado a notar que, al postularse para puestos laborales, las acreditaciones de las instituciones educativas son mencionadas y valoradas en las entrevistas de trabajo”, comenta el directivo de la URP.

Gestión de calidad
Una de las condiciones que debe cumplir una carrera para ser acreditada es contar con un buen sistema de gestión de calidad. Este proceso implica una toma de conciencia no solo por parte del personal docente, sino también del personal administrativo y de servicio.
“Garantizar un sistema de calidad exige un esfuerzo conjunto. La acreditación debe comenzar por la autoevaluación de nuestras fortalezas, pero también de nuestros defectos y debilidades, para poder superarlos de manera colaborativa. Todos tienen la obligación de velar por el cuidado de las áreas verdes, la preservación de la infraestructura y la adquisición de tecnología actualizada para mantenerse competitivos en un entorno cada vez más desafiante”, enfatiza el Dr. Flores Barboza.
Una vez que se logre acreditar todas las carreras, el siguiente paso será buscar la acreditación institucional de la universidad en su conjunto. Este es un hito importante en el camino hacia la excelencia y demuestra un claro compromiso con la mejora continua.

Cambio de modelo
Otro tema fundamental en todo lo que se refiere a la calidad educativa es la implementación del Nuevo Modelo Pedagógico de la URP, presentado el 27 de octubre. Se trata de un modelo por competencias que se enfoca en la integralidad de la educación, es decir, prioriza la orientación hacia la práctica tanto para la investigación como para la docencia. En esa línea, no solamente tiene que ver con la didáctica y la manera de impartir las clases, sino con una mirada mucho más amplia, que ve el país en toda su problemática, con el objetivo de que los estudiantes aprendan a resolver problemas en la vida real.
Esto les proporciona la oportunidad de conectar con el mundo y sus complicaciones, de comprender el Perú profundo no solo a partir de sus tradiciones, sino también de sus desafíos. De esta manera, los estudiantes se preparan de forma más efectiva para enfrentar los retos presentes en las empresas y mejorar su competitividad en el ámbito profesional.
“Nuestro modelo por competencias parte de la idea de vincular las asignaturas impartidas con la realidad a la que están orientadas, de manera que los graduados estén capacitados para solucionar problemas, ya sea en los campos del derecho, de las ingenierías u otros”, indica el Dr. José Flores Barboza.
Sin embargo, este Nuevo Modelo Pedagógico será exitoso solo en la medida en que los estudiantes accedan al mercado laboral para ejercer su profesión en beneficio de la sociedad. En tal sentido, la Universidad también se preocupa por mantener un estrecho vínculo con las empresas y con todas las entidades del Estado relacionadas con los aspectos laborales.
El directivo destaca el liderazgo del rector, Dr. Iván Rodríguez Chávez, en este proceso de mejoras y cambios, porque “no solamente se preocupa, sino que nos exige a todos los que formamos el cuerpo de autoridades responsables de estos avances y evoluciones poner a nuestra Universidad al nivel de las mejores instituciones educativas del país y en las mejores posiciones de los rankings internacionales”.
Como resalta el Dr. José Flores Barboza, una universidad tiene sentido en la medida en que contribuye al desarrollo de la zona en la que está ubicada. La URP se centra en el factor humano, la investigación y la preparación de los estudiantes para competir en el mercado laboral nacional.
Empresa Editora El Comercio
Copyright© elcomercio.pe – Grupo El Comercio
Todos los derechos reservados