“Hace tres años, los profesionales se desenvolvían de una forma muy diferente, los proyectos, funciones y equipos de trabajo se manejaban principalmente de forma presencial. Hoy, esto cambió, por lo que se requieren nuevas competencias y herramientas, muchas de las cuales se obtienen a través de maestrías”, comenta Sandro Ragonesi, director ejecutivo de la Escuela de Postgrado de la UPC.

A decir del especialista, las empresas privilegian a los profesionales que op- tan por cursar una maestría. “Los programas más interesantes y los MBA, por ejemplo, mantienen entre sus requisitos un mínimo de años en el mercado laboral y sustentar que manejas un puesto de importancia o tienes un equipo a cargo”, añade.

✓ PROGRAMAS EN CRECIMIENTO
Las especialistas en coaching Patricia Cánepa y Patricia Merino señalan en su libro “El futuro del trabajo” que el e-commerce y el teletrabajo se incorporaron a nuestras vidas mucho más rápido de lo previsto. Ello repercutió en que aparecieran o se consolidaran nuevas carreras y programas de posgrado durante y después de la pandemia.

En ese sentido, Ragonesi detalla que las maestrías ligadas a la administración de proyectos, dirección de sistemas, transformación de negocio digital, comunicación y marketing digital o emprendimiento se encuentran en pleno auge.

“Hoy, los programas se manejan como un híbrido entre lo presencial y lo virtual, la tecnología es cada vez más importante para la comunicación y el marketing ha virado y se enfoca en lo digital y en las redes sociales. Todos estos cambios se aceleraron aún más por el COVID-19”, indica el vocero de la UPC.

No obstante, las maestrías tradicionales aún mantienen un espacio muy importante. Ragonesi indica que los MBA y las maestrías de talento, factor humano, dirección de operaciones, logística, gestión pública, entre otras, continúan llenando aulas y teniendo gran acogida entre los profesionales y las propias organizaciones.

“También llegan con mucha fuerza las maestrías vinculadas con las tecnologías de la información y la virtualidad. El blockchain, el Big Data y la seguridad digital son componentes que poco a poco se vuelven más importantes para las organizaciones, y las casas de estudios nacionales ya empiezan a responder con maestrías especializadas”, agrega Lucas Reaño.

Por su parte, Ragonesi finaliza aconsejando a los que piensan iniciar una maestría durante los próximos meses que analicen bien su situación profesional y hacia dónde quieren dirigir su futuro. “Es un gran esfuerzo el que se requiere para llevar estos programas, no solo financiero, sino también personal”.

▶ EL VALOR DEL DOCTORADO
El especialista Lucas Reaño afirma que los doctorados tienen otro tipo de valor para las empresas. “Un profesional que cuenta con estudios de este tipo ostenta un prestigio diferente, porque tiene un valor en el mundo académico y en el terreno de la investigación. Pero este tipo de programas altamente especializados se recomiendan solo a quienes cuenten con el tiempo necesario para cursarlos”, opina.